Si la idea de "trabajar en una habitación" te saca en un sudor frío, ¡puedes ser introvertido! Impresionar a los posibles empleadores puede ser una tarea estresante, especialmente si falta confianza. Pero hay muchas cosas que puedes hacer para asegurarte de que te des cuenta.
- Reconozca sus puntos fuertes: Cuanto mayor sea su comprensión de lo que es bueno, más probable es que otros reconozcan estos puntos fuertes. Intente elaborar una lista de sus mejores cualidades y logros en su vida (incluso si no cree que sean particularmente relevantes). Las actividades como el voluntariado y ser miembro de un club o sociedad son muy valoradas por los empleadores, ya que permiten comprender mejor quién es usted. Tal vez intente que un amigo o familiar escriba una lista similar para usted, para ver cuáles creen que son sus principales puntos fuertes. No tenga miedo de escribir algunos negativos también. El hecho de que se le pregunte sobre un rasgo negativo personal es una pregunta habitual en las entrevistas de trabajo, y una respuesta respaldada por la forma en que ha intentado convertir ese rasgo negativo en positivo le resultará bien a cualquier entrevistador. Sin embargo, trate de no ser demasiado duro con usted mismo.
- Elogiarse indirectamente: Los introvertidos y los que sufren de timidez tienden a caminar de la mano de la modestia. La jactancia es normalmente algo que intentas evitar. Los entrevistadores quieren saber qué puede ofrecer al puesto que le interesa o que solicita, y qué le diferencia de los demás solicitantes. Responder a una pregunta de manera indirecta, como por ejemplo: “Dime por qué harías un buen líder” puede eliminar la sensación de arrogancia, al tiempo que promueve tus características de correspondencia con el empleador al mismo tiempo. El uso del método DEL VEHÍCULO (circunstancia, acción y resultado) es una gran plantilla en estas situaciones. Respondiendo revelando una experiencia anterior como, "Fui líder durante un día en un ejercicio de World Challenge, esto es lo que hice, y de esto aprendí esto", presentará la información relevante al tiempo que erradicará cualquier sensación de jactancia.
- Siempre hay espacio para la preparación: Al entrar en cualquier situación de grupo, nunca es mala idea hacer un poco de preparación de antemano. Si está planeando asistir a una feria profesional y hay un determinado empleador que asiste, siempre vale la pena tener un plan para lo que le gustaría preguntar. "¿Cómo terminó en su puesto actual?" Y "¿Cuáles son los aspectos positivos/negativos para trabajar en...?" O "¿Cómo es tu día típico?" todas son preguntas valiosas. En su preparación, describa lo que desea aprender/obtener de la experiencia, así como anotar todo lo que le gustaría compartir. De esta manera, podrá obtener lo que desea de su día en la feria de carreras, al tiempo que imprime una impresión positiva en el empleador y minimiza cualquier sensación de nerviosismo al mismo tiempo. Nuestra publicación en profundidad sobre cómo brillar en situaciones sociales únicas, como las ferias profesionales , le dará consejos aún más prácticos como estos.
- Utilice las redes sociales: Va a asistir a un evento al que asiste un posible empleador o un ejecutivo sénior. Haga su tarea a través de las redes sociales siguiéndolas en Twitter o explore su perfil de LinkedIn. Aún mejor, visite su página de Facebook para obtener más información sobre la cultura de su empresa y preparar algunas preguntas de actualidad, lo que sin duda impresionará al mostrar que ha realizado su investigación de esta manera.
- Sea fiel a usted: Los introvertidos suelen sobresalir en conversaciones individuales. Tanto si conoce a un posible empleador, como si hace networking en un evento o simplemente se encuentra en un "escenario de bar", haga todo lo posible. Es poco probable que un introvertido quiera "trabajar en la habitación", así que sigue haciendo lo que haces bien.
- Siga siempre la entrevista: Todos sabemos ese sentimiento posterior a la entrevista en el que deseábamos haber ampliado un tema en particular o hablar de un proyecto en particular. Escribir un correo electrónico de seguimiento después de la entrevista le permitirá hacerlo. Puede dar las gracias al entrevistador por su tiempo, decir lo que ha aprendido de la experiencia y confirmar su interés en el puesto que le interesa. Siempre hay espacio para decir "Me gustaría ampliar mi participación en este proyecto", o "Solo quería añadir". Esto ayudará a suprimir esos pensamientos molestos en su cabeza.
- Recargue las baterías: Incluso los conejitos de Duracell se quedan sin vapor eventualmente. Los introvertidos necesitan ese tiempo y espacio para recoger sus pensamientos, así que dedique tiempo a esto. Si tiene dos eventos sociales seguidos, dedique un poco de tiempo a prepararse para la siguiente. Esto se puede hacer a través de una corta caminata o, sin embargo, funciona mejor para usted. De esta manera no temerás lo que está por venir, ya que te habrás dado el tiempo adecuado para revitalizarte.
- Siempre hay una: Esa persona que siempre inicia la conversación. La realidad es que los eventos de networking están llenos de gente que espera que alguien hable con ellos. Todos conocemos la sensación de alivio cuando alguien empieza a charlar contigo, así que ¿por qué no darle una oportunidad? Permítete dictar el camino de la conversación presentándote primero y haciendo preguntas. Hacer una pregunta indica interés y hacer un seguimiento con más preguntas (siempre y cuando sean relevantes) muestra que está prestando mucha atención. De esta manera, la otra persona está haciendo la mayor parte de la conversación, mientras que usted se convierte en el individuo seguro.
- Llame a un amigo: Aunque esta vez puede hacerlo sin que Chris Tarrant interprete al intermediario. Organizar a un amigo para asistir a un evento de networking puede ayudar a aliviar las preocupaciones y la ansiedad. Puede darle un impulso de confianza al entrar en la habitación y garantiza que no se quede solo en la esquina. Si bien ambos se mezclan y tienen una "pequeña conversación" con nuevas personas, simplemente puede permitirles presentarse a las personas que acaban de conocer.
- Sonríe, va muy lejos: El viejo dicho no podría estar más cerca de la verdad. Una sonrisa atrae inmediatamente a la gente hacia usted e invita a la conversación. Sonreír también puede ayudarte a sentirte seguro, ya que te deja caer las endorfinas que te hacen sentir bien. Caminar con una expresión de pegajosidad no atraerá a otros en un entorno social para iniciar una conversación.
Ser introvertido no es malo. Probablemente sea intuitivo y creativo, y su diplomacia podría ser útil en la sala de juntas algún día. Es posible que a veces la interacción social y la autopromoción sean un poco incómodas, pero siempre y cuando sepas jugar con tus mejores cualidades, serás tan impresionante como el extrovertido más seguro.